Cuentan que en un lugar al norte del Perú, en el Departamento de Piura, existe un lugar fantástico llamado "La Encantada".
Dicen que su nombre se debe a los "encantos" que hay en la zona, a la riqueza cultural y artesanal de su gente y a los relatos y leyendas que lo acompañan.
Los encantos de La Encantada pertenecen a la tradición oral, uno de los aspectos de la cultura campesina de Piura, que nos da a conocer las costumbres y creencias de los campesinos y nos habla de un gran maestro ceramista, don Max Inga Adanaqué, cuyo espíritu artístico, parece haberse empoderado de la gente de esta tierra, que hace de la misma un verdadero encanto.
La arcilla, riqueza natural de esta zona del bosque seco ecuatorial, se transforma aquí en obra de arte, gracias a la maestría de sus artistas, que la modelan y la vivifican en esculturas, jarrones, platos y demás decoraciones, encontrándose en éstas la magia y el alma de unas culturas ancestrales, la Vicus y Tallanes. Comentan, los que poseen una de estas piezas, percibir en sus hogares una especial energía positiva, energía que sólo puede proceder de la tierra de los "encantos".
Estos ceramistas y a la vez buriladores, músicos y narradores, abren las puertas de su comunidad a través de este portal para dar a conocer el origen de la Asociación: "Tierra Encantada".
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